Patti Smith lo describe como “una hoja de ruta para mi vida”.

M Train comienza en el pequeño café de Greenwich Village, donde Smith va todas las mañanas a tomar café negro, reflexiona sobre el mundo tal como es y el mundo tal como era, y escribe en su cuaderno. A través de una prosa que cambia fluidamente entre sueños y realidad, pasado y presente viajamos a la Casa Azul de Frida Kahlo en México; al fértil terreno lunar de Islandia; a un destartalado bungalow junto al mar en Far Rockaway, Nueva York, que Smith adquiere justo antes del huracán Sandy; a la estación de metro West 4th Street, llena de los sonidos del Velvet Underground después de la muerte de Lou Reed; y a las tumbas de Genet, Plath, Rimbaud y Mishima.

Entretejidos hay reflexiones sobre el oficio del escritor y sobre la creación artística. Aquí también hay recuerdos singulares de la vida de Smith en Michigan y la pérdida irremediable de su esposo, Fred Sonic Smith.

Trenzando la desesperación con esperanza y consuelo, ilustrado con su firma Polaroids, M Train es una meditación sobre viajes, espectáculos de detectives, literatura y café. Es un libro poderoso y profundamente conmovedor de uno de los artistas multiplataforma más notables que trabajan en la actualidad.